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Despidos en el Estado ¿Cómo me afectan?


06 de julio de 2024

Una nueva ola de despidos ha dejado a más de 2.000 personas sin trabajo en el Estado nacional. El plan de ajuste de Javier Milei continúa dejando a trabajadores y trabajadoras en la calle dejando áreas enteras al borde del cierre ¿Cómo afecta esto a los demás argentinos?

Noelia Ferrario

El plan de ajuste del Gobierno sigue llevándose puesto a trabajadores y trabajadoras del Estado. En esta ocasión, son más de 2000 las personas que se quedaron sin trabajo. Desde el Gobierno Nacional se argumenta que estos despidos son para volver más “eficiente” el Estado y evitar gastos superfluos. Sin embargo, estos despidos dejan casi sin funcionamiento a áreas clave en acompañamiento a sectores vulnerados, salud y cultura.

 

¿Por qué me importan los despidos en Radio Nacional?

Radio Nacional fue afectada por despidos y recortes en todo el país. Para quienes viven fuera de Buenos Aires, eso significa que el contenido propio de la provincia fue reemplazado por una repetidora que emite el contenido de Buenos Aires.

El impacto de esta decisión quedó demostrado en los últimos días en los cuales, producto de la ola de frío que atraviesa el país, la provincia de Neuquén quedó aislada por la nieve. Producto del temporal el servicio de internet estaba caído, y aquellas personas que quedaron aisladas no pudieron enterarse del estado de las rutas porque en la radio lo que se informaba era el estado del subte.

 

¿En qué me afecta el cierre de las delegaciones del ANSES?

Como parte del plan de ajuste, el Gobierno decidió cerrar alrededor de 100 Unidades de Atención Integral (UDAI) en todo el país. Estas unidades cumplían la función de facilitarle a la población los trámites que el ANSES realiza, como pueden ser jubilaciones, beca Progresar, salario familiar, AUH, etc.

A partir de ahora una gran cantidad de regiones se quedan sin un punto de atención. Esto quiere decir que, si quien necesita tramitar su jubilación, pedir una beca Progresar para ir a la universidad o tramitar el salario familiar no tiene acceso a internet (en un contexto en el cual se desreguló completamente el precio de las telecomunicaciones) entonces esa persona deberá trasladarse hasta una región diferente para poder acceder a esos programas.

 

¿Y con la salud qué pasa?

Como parte de esta última ola de despidos trascendieron los despidos en el Hospital Posadas. Entre los despedidos se encuentran profesionales que no sólo son claves para el funcionamiento del hospital, sino que son especialistas que atienden pacientes derivados de todo el país.

El Hospital Posadas, uno de los más grandes del sistema público, recibe una gran cantidad de pacientes derivados desde otras áreas del país para atender patologías que requieren una mayor complejidad. Entre estas especialidades el hospital se ha convertido en una referencia hemato-oncología adolescente, pero a partir de esta ola de despidos ya no se encuentra trabajando en el hospital la única profesional encargada de realizar el diagnóstico y seguimiento de estos pacientes.

En un contexto económico que empuja a una mayor cantidad de gente al sistema de salud público, con un aumento de consultas que en PBA aumentó en un 20% en lo que va del año, el Gobierno decide recortar “gastos” en salarios de profesionales y en programas de asistencia en la compra de remedios.

 

¿No hay plata?

El ajuste llegó a infinidad de sectores fundamenta del Estado. Además de los mencionados destacan los despidos en la línea 144, fundamental en el acompañamiento y asistencia a víctimas de violencia de género y gran cantidad de programas y subsidios que buscan proteger y prevenir la violencia contra las mujeres y la comunidad LGTBQ+, que dejan tan sólo dos operadoras por turno que, sin recursos, deben acompañar a todas las víctimas de violencia de género del país.

Pero no todos los sectores salieron desfavorecidos en el reparto de recursos del gobierno de Milei. Mientras se recorta en cultura, salud, asistencia social y políticas de género, en mayo de este año se anunciaron reasignaciones presupuestarias para algunos programas gubernamentales. Entre ellos, se aumenta el presupuesto de jefatura de Gabinete, y se aumenta el presupuesto destinado a la formación y capacitación de las fuerzas de seguridad, así como el del “Programa 16: Ejercicio de la Acción Pública y Defensa de la Legalidad”, encargado de la “persecución en sede penal del castigo de quienes delinquen, así como la defensa en juicio (en representación de la sociedad) de la legalidad, la supremacía constitucional y la jurisdicción de los tribunales nacionales”.

En un contexto de creciente conflictividad, y con el anuncio de nuevas ramas de fuerzas que dependen del ministerio de Seguridad (como la Unidad de Seguridad Productiva), queda en evidencia cuáles son las verdaderas prioridades del Gobierno. No hay plata para la compra de remedios oncológicos, pero sí la hay para fortalecer las fuerzas represivas que van a garantizar los proyectos extractivistas y el ajuste a la población.

Noelia Ferrario

Noelia Ferrario es periodista e historiadora. 

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