López Obrador propone reformar la Constitución y la oposición mexicana viaja a Washington
10 de febrero de 2024
El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador (AMLO) anunció una serie de iniciativas de reforma constitucional de carácter polÃtico, económico, laboral, educativo, electoral y social, que serán enviadas inmediatamente al Congreso para su discusión. Mientras tanto, la candidata presidencial opositora en México, Xóchitl Gálvez instó a su auditorio del Wilson Center de Washington a promover la injerencia e interferencia extranjera en las elecciones presidenciales de junio próximo cuando se enfrentará a la oficialista Claudia Sheinbaum.
El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador (AMLO) anunció una serie de iniciativas de reforma constitucional de carácter político, económico, laboral, educativo, electoral y social, que serán enviadas inmediatamente al Congreso para su discusión. Morena, el partido de AMLO, domina el 65% de la Cámara de Diputados junto con sus aliados de izquierda.
López Obrador propuso una veintena de medidas para modificar artículos constitucionales “impopulares” que han ido en contra del interés público con el objetivo de proteger a los mexicanos más desfavorecidos y potenciar sus oportunidades de desarrollo.
En materia política, anunció una iniciativa para eliminar a los legisladores plurinominales, con lo que se recortarían 200 diputados y 64 senadores, de manera que la Cámara baja quedaría con 300 miembros y la Cámara alta, con 64. Anunció también que promoverá una iniciativa para que jueces, magistrados y ministros del Poder Judicial sean electos a través del voto ciudadano.
Propuso cambios profundos al Poder Judicial; devolver a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) su carácter público y estratégico; asignar la Guardia Nacional al Ejército; fortalecer la austeridad republicana y desaparecer organismos autónomos.
En torno a este último ítem, el mandatario dijo que se eliminarán todas las dependencias y organismos onerosos y elitistas supuestamente autónomos, “sí, autónomos del pueblo, no de la oligarquía, creados durante el periodo neoliberal con el único propósito de proteger negocios particulares en contra del interés público”.
Asimismo destacó que con el objeto de revertir las facilidades para la privatización en materia de energía eléctrica se promoverá una reforma para devolver a la CFE su carácter público y estratégico. Se prohibirá el uso del fracking para la explotación de hidrocarburos; las concesiones de minas a cielo abierto y el maíz transgénico.
Otra de las modificaciones es el reforzamiento de la austeridad republicana como política de Estado, y se propone que se incorpore al artículo 127 constitucional el principio de que ningún servidor público perciba más que el Presidente. No se permitirán privilegios ni extravagancias en ninguno de los poderes del gobierno federal para llevar a los hechos las palabras y las recomendaciones a los servidores públicos del presidente Benito Juárez, señaló.
Según el proyecto, disminuirá el gasto de organización electoral, el financiamiento de campañas y de partidos, al tiempo que el umbral para ser vinculatorios los resultados de una consulta popular bajará de 40 a 30 por ciento del padrón electoral como participación mínima, extensivo a la revocación de mandato.
Plantea reconocer a los pueblos indígenas y afromexicanos como sujetos de derecho público, con atención preferente; consultarlos cuando se realicen obras que puedan afectar su vida o entorno y dotarlos de legitimidad jurídica para recibir recursos del presupuesto y promover acciones de inconstitucionalidad de leyes que les afecten.
«La esencia de estas medidas es reencausar la vida pública. Estas propuestas son distintas y contrapuestas a las reformas que se aprobaron en todo el periodo neoliberal, cuando en esos 36 años de ese oscuro periodo no se pensó en beneficiar al pueblo, sino que se pensó en ajustar el marco legal para el despojo en favor de una minoría (…) Nunca en 36 años se aprobó algo para la justicia social”, dijo López Obrador.
Entre las iniciativas figura la intención de modificar las políticas de jubilación, con cambios a las reformas promovidas en la materia en 1997 por el presidente Ernesto Zedillo y en 2007, siendo presidente ya Felipe Calderón. López Obrador prometió un capital semilla de unos 3,800 millones de dólares, para poder facilitar que los mexicanos puedan lograr una pensión equivalente al 100% de su salario durante su vida laboral. Este capital, dijo el presidente, se irá incrementando año con año.
Además promovió el derecho a la entrega de becas para estudiantes de familias pobres y propuso elevar rango constitucional programas como la pensión de adultos mayores, Jóvenes Construyendo el Futuro y Sembrando Vida.
Desde la sede del antiguo Congreso de la Unión que se ubica al interior del Palacio Nacional y donde se aprobó la Constitución de 1857, López Obrador En tanto, anunció que se propondrá la prohibición de la comercialización de vapeadores y de drogas químicas como el fentanilo.
Las reformas
- Reconocer a los pueblos, comunidades indígenas y pueblos afromexicanos como sujetos de derechos.
- Reafirmar el derecho a la pensión a partir de los 65 años y aumentar el monto año con año. Lo mismo para personas con discapacidad.
- Otorgar becas a estudiantes de familias pobres.
- Garantizar atención médica integral gratuita.
- Que los trabajadores y sus familias puedan ser dueños de sus viviendas.
- Prohibir el maltrato a los animales.
- Prohibir en México el maíz transgénico y el fracking, no otorgar concesiones mineras a cielo abierto.
- Hacer respetar las zonas con escasez de agua y solo dar concesiones para uso doméstico.
- Prohibir el comercio de vapeadores y de drogas químicas como el fentanilo. Analizar el delito de extorsión que lleva a cabo la delincuencia organizada y el delito fiscal de la delincuencia de cuello blanco.
- No permitir el aumento al salario mínimo, menor a la inflación anual.
- El salario mínimo para maestros, policías, marinos y no podrá ser menor al que reciben los trabajadores al IMSS.
- Plantea revertir reformas de pensiones y propone, para mayo, un fondo semilla que se irá incrementando poco a poco .
- Garantizar el derecho a la educación y el trabajo.
- Los campesinos contarán con un jornal seguro y permanente.
- Se utilizarán para trenes de pasajeros los 18 mil kilómetros de vías férreas, concesionadas con Ernesto Zedillo. El Estado está obligado a garantizar el derecho a los servicios de internet, con empresa pública o mediante concesiones. Se le devolverá a la CFE su carácter de empresa pública y estratégica, agrega.
- La nueva iniciativa de reforma electoral contempla la reducción de gastos destinados a campañas y partidos políticos. Disminuir regidores, evitar el uso de excesivas estructuras burocráticas electorales y eliminar a los plurinominales.
- Apunta que magistrados y consejeros de organismos electorales deberán ser electos por los ciudadanos. Menciona una reducción al 30% para que las consultas sean vinculantes.
- Que la Guardia Nacional pase a la Sedena.
- Convertir en política de Estado la austeridad republicana.
- Eliminar todas las dependencias y organismos onerosos, “supuestamente autónomos del pueblo” creados en el periodo neoliberal para proteger negocios particulares en contra del interés público.
Xóchitl Gálvez paseó su irresponsabilidad política por EEUU
La candidata presidencial opositora en México, Xóchitl Gálvez instó a su auditorio del Wilson Center de Washington a promover la injerencia e interferencia extranjera en las elecciones presidenciales de junio próximo cuando se enfrentará a la oficialista Claudia Sheinbaum, e insinuó que, de vencer ella, volvería a someter a empresas foráneas la energía, la salud, la educación, la infraestructura y la seguridad del país.
En el foro organizado en el Instituto México del Wilson Center en Washington, la candidata presidencial de PAN, PRI y PRD, Gálvez, hizo una serie de declaraciones lesivas para la soberanía nacional y violatorias de la política exterior mexicana consagrada en la Constitución, señala un editorial del diario La Jornada.
Un triunfo de Sheinbaum supondría un «regreso al autoritarismo en México» y un «intento de terminar con la joven democracia mexicana», aseveró. “No piensen ni por un instante que los intereses de Estados Unidos en migración, seguridad, comercio o en cualquier otro tema avanzarán con el regreso del autoritarismo a México”, dijo.
La candidata presidencial de la coalición opositora afirmó que la democracia está en peligro en su país y pidió a Estados Unidos que observe de cerca las elecciones del próximo 2 de junio. «Les pido que estén atentos y nos acompañen en este difícil periodo. Sigan de cerca lo que pasa en México. No dejen a la democracia mexicana fuera de la agenda bilateral», expresó en el Centro Wilson de Washington.
“Estoy convencida que México es un país de 170 millones de personas dividido por un río y aquí está el estado 33”, dijo para congraciarse con sus compatriotas residentes en Estados Unidos.desde el Wilson Center, en Washington, señaló que la mayor amenaza de la soberanía de México es la del crimen organizado. En el mejor de los casos, @lopezobrador es débil e incompetente ante el crimen; en el peor, lo aprovecha para consolidar su poder” señaló en redes sociales.
Advirtió incluso que detrás de los aguacates de Michoacán que muchos comerán durante el próximo Super Bowl, previsto para este domingo 11 de febrero, se esconden las «extorsiones» del crimen organizado.
Acusó a López Obrador de coquetear con Rusia y China, y de utilizar la inmigración y el fentanilo como una herramienta de «chantaje» contra el gobierno estadounidense.
Durante estos encuentros, donde también participaron inversionistas y el Consejo de Relaciones Exteriores de Nueva York, Gálvez expresó su preocupación por el futuro del sector energético en México y la “fallida estrategia de seguridad” implementada por el Gobierno Federal, que, consideró, «ha perjudicado a cientos de familias mexicanas».
Abordada por la prensa para conocer su postura tras lo dicho por Donald Trump, nuevamente aspirante a la presidencia de Estados Unidos, algo por lo que ella remarcó que los migrantes hacían un buen trabajo aunque previamente pronunció una frase que indignó a los internautas, tras asegurar que estaban en EEUU para lavar los baños.
“Bueno, Donald Trump dice eso porque es candidato”, fue la frase con la que inició su respuesta. Más tarde aseguró que “Yo nomás lo quiero ver lavando los baños de su casa o de algunas casas de personas que viven en Estados Unidos. Los migrantes hacen un trabajo impresionante en EEUU y no se puede nada más sacarlos”, dijo. Sus palabras hicieron recordar al expresidente Vicente Fox, su padrino político, quien aseguró que “los mexicanos hacen trabajos que ni los negros quieren hacer”.
Indignación
Las palabras de la candidata en suelo extranjero son motivo de inquietud e indignación. Sin dudas, los llamados a la injerencia en los asuntos internos de su país y las graves acusaciones contra las autoridades mexicanas constituyen una intriga cuando se pronuncian en un país extranjero que siempre ha tenido vocación intervencionista y en un foro que reúne a halcones del neocolonialismo y la política imperial del país vecino.
La ex senadora panista aseguró que está en el interés de millones de mexicanos que Estados Unidos sea un socio y aliado geopolítico de México, pero que dicha alianza se ve frustrada porque el gobierno populista de México coquetea con Rusia y China, a la vez que denunció una falta de voluntad de López Obrador para colaborar con Washington, y dijo que su única prioridad es mantener a EEUU lejos para seguir concentrando su poder; para eso, fingirá cooperación, pero no cooperará, añadió.
Gálvez afirmó que la continuidad de Morena, el partido de López Obrador, en el poder es garantía de que ni la migración ni el fentanilo, ni ningún otro problema bilateral encontrarán solución de largo plazo,
Las palabras de Gálvez, que trabajó en el gabinete del expresidente Vicente Fox y gobernó la alcaldía Miguel Hidalgo, brindan argumentos a los sectores más cavernarios de EEUU para que intensifiquen sus ataques contra el país, cuando poderosos políticos estadounidenses, tratando de ocultar su inoperancia en la resolución de sus propios problemas, proponen que sus fuerzas armadas bombardeen e invadan México.
Sin querer, la candidata opositora dejó en claro que el actual gobierno mexicano defiende los intereses nacionales y la soberanía del país, en su afán de favorecer nuevas embestidas de los poderes fácticos ávidos de medrar con los recursos naturales y humanos mexicanos.
Con su irresponsabilidad, Gálvez socava la posibilidad de convertirse en titular del Ejecutivo, pues hace gala de una completa ignorancia sobre el sentir mayoritario que emana de la historia nacional. Esta desconexión de una convicción popular tan arraigada como el nacionalismo defensivo probablemente multiplique las expresiones de repudio que ya padece, excepto entre el segmento oligárquico que se enriqueció en sexenios anteriores a expensas del país con la entrega de los hidrocarburos, la industria eléctrica, el agro y muchos otros sectores estratégicos.
Ella, por supuesto, es libre de conducir su campaña como crea más adecuado, pero no de atentar contra la nación azuzando intervenciones que siempre han terminado mal para México y peor para sus autores.
El rechazo a tales acciones no es un asunto de preferencias políticas, partidos ni programas electorales, sino de integridad nacional. La candidata y sus asesores deberían ser conscientes de que no hay manera más segura de desgarrar al país y de conducirlo al desastre que envalentonar a las élites que siempre han buscado alianzas en el extranjero para imponer agendas antipopulares.
Así lo demuestra la reciente experiencia del ciclo neoliberal, cuatro décadas en las que la soberanía y el bienestar de la clase trabajadora sufrieron un desmantelamiento sistemático. Ahora, unas cuantas palabras soltadas a la ligera por una política irresponsable pueden tener un costo altísimo para el Estado mexicano, por lo que no cabe sino deplorar el despropósito, llamar a las derechas a comportarse con un mínimo decoro en sus manifestaciones públicas y hacer votos por que las impresentables expresiones comentadas tengan el menor eco posible en la clase política del país vecino