24/12/2022

Opinión

Así la vemos: Campeones mundiales y la politiquería al descenso

La alegría de un grupo de muchachos nos la ofrendó, los ineptos se ofenden. Columna de opinión desde los adultos mayores, por Alberto Gómez.

Autor de la nota: Alberto Gomez

Alberto Gomez

Publicado el 24 de Diciembre de 2022


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Nunca la oligarquía fue hostil con nadie que pudiera serle útil. El poder y el dinero no tuvieron nunca malos antecedentes para un oligarca genuino. Evita

 

Llegó la alegría futbolera, el grupo de jugadores y cuerpo técnico la consiguieron con coraje, futbol y sentimiento nacional. No es extraño que todos ellos, se la adjudiquen al apoyo del Pueblo, comprometiéndose a ofrendarla en el país.

La gozamos quienes nos unimos a ese equipo y su cuerpo técnico para festejarla con ellos. La politiquería, se vio sorprendida por la muchedumbre, como siempre.

Debemos siempre recordar, que ese grupo de argentinos, ganador indiscutible a nivel ecuménico, siempre sufrió el embate traidor de la prensa hegemónica, los quisieron voltear desde el inicio del ciclo, los estigmatizaron, los persiguieron, solo el amor de su Pueblo los sostuvo. Por eso, nos lo devolvieron ofreciendo la Copa en un paseo solitario, solo con la muchedumbre gozosa, alejados de los traidores.

Para la ausente política, espero hayan entendido que para contar con la fuerza del Pueblo, hay que ganársela, hay que buscarla cumpliendo promesas, luchando, sin importar contra quien ó quienes. Se la merece trabajando, gestionando; más allá de errores o defectos; pero siempre cumpliendo los objetivos de generar alegría, para que los beneficios alcance a Todos, sin distinciones.

Esta semana, se representó el típico contrasentido argentino. Unos gozaron amuchados, mientras otros sufren, y reclaman. Una muchedumbre se concentró para agradecerle, muy justamente, a su equipo la alegría ofrendada.

Mientras, a pocas horas, y cuadras, otros muchos, acampan para pedir libertad de argentinas/os presos políticos, perseguidos, estigmatizados y detenidos por darles identidad, trabajo, vivienda, salud a su invisibilizada y sojuzgada gente pobre.

Por el lado de la politiquería, no solo la lucha interna abandonó a nuestros jugadores, los dejó librado a su suerte, o mejor dicho de su Pueblo. Además, el Presidente, se siente impotente democráticamente para firmar Decretos, tanto para indultar como para la distribución de recursos en un país federal.

Concluyamos, el único gobierno que actúa es el del “poder real”, la democracia, ¡fue!

El Mundial mostró a muchos estrujados de dolor por un jugador iraní juzgado por una “tiranía” por defender del acoso a las mujeres. Pero, no escuchamos (ni a su propio género) defender a una mujer encarcelada hace 7 años por un señor feudal.

Allí, Irán, en una cultura diferente, sin saber la realidad de las acciones de ese joven para ser acusado, lo sufren y discursean en su defensa. Acá, silencio absoluto.

La maquinaria des-informativa, la politiquería opositora, la ausencia de gestión propia, y la indigestión votada, precisa derrotas, que no se asocien éxitos a la disputa de sillones en organigramas. No quieren a la Argentina, odian lo popular, vallan sus miserias, esconden la realidad, la dibujan, en definitiva, conspiran; consiente e inconscientemente; contra la democracia.

El nuevo golpismo, había tocado fondo del basural mental. Salió a apalear el sagrado sentimiento popular, el fútbol. La indecente prensa empresarial, y muchos de sus desvergonzados esbirros, gerenciadores del odio que derraman los empresarios, y a través de la pluma de sus Editorialistas, trataron de ridiculizar el más hermoso, y puro, sentimiento popular.

Los mismos que nos habían robado el fútbol doméstico, lo escondieron y lo mercantilizó para alejarlo del goce de los pobres. Hoy, despotrican y proponen mejorarlo, reducirla para favorecer a los “cuatro vivos” que también esconde el deporte. Les importa un pito el disfrute y la alegría de los de abajo, solo quieren facturar, solo engrosar sus bolsillos. El deporte, ¿que deporte?

Los que hemos vivido algunos años, pasamos muchos contrasentidos, un Mundial (78) bajo un régimen dictatorial, festejando mientras se escuchaban los dolores de los detenidos y la ausencia de los desaparecidos. Disfrutamos en el balcón (86) con un grandioso equipo que había sido torpedeado para su derribo desde el principio. Todo, vertebrado por oscuros poderes y un periodismo cipayo, traidor y falaz.

Son, desmemoriados históricos, que ocultan el accionar mediático en los Mundial78 y Juvenil79. Los viejos, seguidores del fútbol, lo sabemos, por haberlo escuchado en Radio Rivadavia, a José María Muñoz “Vayamos todos a la Avenida de Mayo y demostremos a los señores de la Comisión que la Argentina no tiene nada que ocultar”. “Los argentinos somos derechos y humanos”, inoculaba el fallecido gordo.

Es tal el sinsentido argentino que los mismos que se quejan hoy, y preocupan, del feriado para que la gente festeje con su equipo campeón, son los mismos que hace 21 años decretaban el Estado de Sitio, para dominar un Pueblo sublevado, y generó 39 muertes de argentinos/as. No mostraron ninguna preocupación, menos aún arrepentimiento. Siguen dando consejos antipopulares y cipayescos.

Muchos han quedado al descubierto, se mostraron sus rostros disfrazados de fanáticos defensores, cuando en realidad la gente, o la inmensa mayoría de ella, les sacó la careta de odiadores seriales. Son defensores de la libertad de empresas, no del pensamiento libre. Son los que se suben a cualquier carro ganador, pero sabemos que fueron ellos los que aflojaron el bulón de las ruedas del mismo carro.

Pero, como toda “Fiesta” se termina, y como dice el Nano Serrat, “con la resaca a cuestas, vuelve el rico a su riqueza, vuelve el pobre a su pobreza y el señor cura a sus misas”, recomenzará la inmensa mayoría del Pueblo a reclamar sus derechos, los burócratas a desinformar y los cipayos a tratar de convencernos que el “mundo” que nos ofreció el mes Mundial, será nuestra guía futura de vida moderna.

Este día de extrema movilización popular para ofrecer su agradecimiento a sus jugadores y cuerpo técnico, le demostró a la politiquería que solo el Pueblo salvará al Pueblo. No sigan con la politiquería, dejen el “mercadeo electoral”, olviden el abulonamiento a cómodos sillones. Que no sea que similar muchedumbre salga a cantar “para el Pueblo lo que es del Pueblo”.

El Pueblo siempre estará al frente de la solidaridad, del esfuerzo, del sacrificio por la Patria, y así cómo salió a agradecerle el éxito de sus jugadores, puede salir a exigir que se cumplan las promesas, se gestione, primero, en beneficio de todos, no solo sublimados a los “cuatro vivos” de siempre.

La gente no aguanta más, no quiere más mentiras y agachadas.

Somos el mejor país del mundo por esa gente agradecida, por los que le ponen el lomo a la producción, los que aún sin nada ayudan a todos los que se les acercan, por los de “buena cuna”, de oro, madera ó cartón. Los honestos laburantes.

Lo sumerge en el tercer mundo la politiquería, la dirigencia cipaya, los traidores, obsecuentes y timoratos. Los corruptos nos esquilman, y los cómplices, ni miran.

Ya estamos en las tradicionales Fiestas, como siempre de origen geopolítico distinto a nuestra idiosincracia. Solo sirven para unirse con los seres queridos, o sobrellevarlas en soledad, con escaseces, con ausencias, con dolores irreparables, pero con el recuerdo de quienes nos ayudaron a vivir nuestra Historia personal.

Felices Fiestas, para Todos los argentinos/as de bien que aman a su país.