14/5/2022
Política
Augusto César Sandino, desde Niquinohomo a la eterna lucha por un mundo mejor
El 18 de Mayo se cumple un nuevo aniversario del nacimiento del gran Augusto César Sandino, una lucha sin cuartel por la independencia de Nicaragua.
Publicado el 14 de Mayo de 2022

Augusto Nicolás Calderón Sandino nace el 18 de mayo de 1895
en Niquinohomo, departamento de Masaya. De niño, trabaja con su madre
recolectando café en las plantaciones del Pacífico nicaragüense.
En octubre de 1909 una insurrección apoyada por Estados
Unidos provoca la renuncia del presidente José Santos Zelaya. Asume el cargo
José Madriz, pero en febrero de 1910 tropas norteamericanas desembarcan en
Corinto y provocan también su renuncia. Luego de múltiples maniobras, toma el
poder Adolfo Díaz, tenedor de libros de una empresa minera norteamericana y
aliado incondicional de Washington. Estados Unidos otorga un par de empréstitos
a Nicaragua y toma, en garantía, el control de las aduanas, el Ferrocarril
Nacional, los vapores del Gran Lago y fondos no utilizados de otro préstamo.
En julio de 1912 estalla una sublevación en contra del
títere Díaz. Tropas norteamericanas desembarcan en Corinto. Benjamín Zeledón
enfrenta a los invasores y muere en combate el 4 de octubre. A sus 17 años
Sandino queda muy impresionado con la imagen del patriota.
En 1916 trabaja como ayudante de mecánica cerca de la
frontera con Costa Rica. Viaja a Honduras en 1920 y a Guatemala en 1923, donde
trabaja en las plantaciones de la United Fruit. Marcha a México y trabaja para
empresas petroleras en Tampico y Cerro Azul.
En agosto de 1925, Estados Unidos retira sus tropas de
Nicaragua; la ocupación ha durado 13 años. Permanecen, sin embargo, los
instructores de la Constabulary, antecesora de la Guardia Nacional. Golpe
militar del general Emiliano Chamorro en octubre. Washington se niega a
reconocerlo.
En mayo de 1926 ocurre un alzamiento liberal en contra de
Chamorro. Tropas norteamericanas desembarcan en Bluefields. Al enterarse del
inicio de la Guerra Constitucionalista, Sandino parte rumbo a Nicaragua a donde
llega el 1º de junio.
El 26 de octubre de 1926 se alza en armas con algunos
trabajadores del mineral de San Albino y se incorpora a la causa
constitucionalista. El 2 de noviembre, en su primer enfrentamiento contra las
tropas conservadoras en El Jícaro, sufre su primera derrota.
El 24 de diciembre, tropas norteamericanas desembarcan en
Puerto Cabezas. Al día siguiente, Sandino consigue armas y municiones con ayuda
de prostitutas del puerto. El general José María Moncada le ordena regresarlas
en una entrevista que sostienen en Prinzapolka; logra conservar las armas e
inicia el retorno a Las Segovias.
En enero de 1927, tropas norteamericanas desembarcan en
Corinto. En febrero, Sandino se instala en El Yucapuca e inicia en San Juan de
Segovia una campaña militar victoriosa; participa en un gran número de
combates. Las tropas conservadoras son totalmente derrotadas y Moncada trata de
deshacerse de él enviándolo a Boaco.
A principios de mayo de 1927 mantiene un intercambio
epistolar con Moncada sobre los términos del armisticio que éste ha logrado con
Henry Stimson, delegado del presidente Calvin Coolidge en Nicaragua. El 12 de
mayo de 1927 en una circular dirigida a las autoridades locales de todos los
departamentos anuncia su determinación de continuar la lucha hasta el retiro de
las tropas norteamericanas de ocupación. El 18 de mayo se casa con Blanca
Aráuz.
El 1º de julio de 1927 emite su primer Manifiesto Político
dirigido al pueblo de Nicaragua desde su campamento en Mineral de San Albino.
El 14 de julio responde a la propuesta de rendición que le hiciera Gilbert
Hatfield, capitán de los marines. El 16 de julio, después de una batalla de 15
horas, toma por unas horas El Ocotal. La aviación norteamericana bombardea y
ametralla el poblado causando 300 muertos entre la población civil.
Combate en varias ciudades y se retira hacia su campamento
de El Chipote; inicia la guerra de guerrillas. El 2 de septiembre de 1927 se
constituye el Ejército Defensor de la Soberanía Nacional de Nicaragua. El 14 de
noviembre suscribe el Acuerdo sobre los traidores a la Patria.
En diciembre, los gobiernos de Coolidge y Díaz acuerdan la
transformación de la Constabulary en Guardia Nacional.
Después de varios días de “combate”, el 26 de enero de 1928
los marines alcanzan finalmente la cumbre de El Chipote y encuentran sólo
muñecos de zacate.
El 22 de junio de 1928 el dirigente comunista salvadoreño
Farabundo Martí se incorpora a las filas del sandinismo.
El 6 de noviembre de 1928, en elecciones organizadas y
supervisadas por los marines, es electo presidente el traidor Moncada.
El 23 de mayo de 1929 sale de Nicaragua con rumbo a México
buscando, infructuosamente, el apoyo del presidente mexicano Emilio Portes Gil.
Sus generales prosiguen la lucha. Regresa a Nicaragua el 16 de mayo de 1930.
El 31 de diciembre de 1930 las tropas de Miguel Ángel Ortez
emboscan una patrulla de marines en Achuapa.
El 15 de febrero de 1931 suscribe su manifiesto Luz y
Verdad.
En noviembre de 1932, Juan Bautista Sacasa es electo
presidente. Poco antes había solicitado la permanencia de los marines, sin
embargo, en esta ocasión Washington se niega.
El 1º de enero de 1933 triunfa la causa sandinista al
retirarse los invasores norteamericanos de territorio nicaragüense. Sacasa
asume la presidencia y el “general” Anastasio Somoza García la jefatura de la
Guardia Nacional. Sandino viaja a Managua en febrero y firma un tratado de paz.
El 20 de mayo viaja nuevamente a Managua para quejarse con
Sacasa por los constantes ataques de la Guardia Nacional en contra de su gente.
Regresa el 30 de noviembre por la misma razón sin obtener resultados.
El 21 de febrero de 1934 al bajar la loma de Tiscapa,
después de una cena con Sacasa, es capturado y posteriormente asesinado con los
generales Francisco Estrada y Juan Pablo Umanzor por orden de Somoza García.
Poco antes, su hermano Sócrates había corrido la misma suerte. El coronel
Santos López, quién participará posteriormente en la fundación del Frente
Sandinista de Liberación Nacional, logra escapar.
El 23 de agosto de 1934, el Congreso decreta una amnistía para todos los crímenes cometidos por la Guardia Nacional.